viernes, 26 de septiembre de 2014

Mi amado barrio Cordón

por Mabel

Nací en la calle Daniel Muñoz esquina Democracia, en el año 1933. Puedo nombrar algunas de las familias que compartían nuestra amistad: Barbato, Usera, Sica, Salveraglio, Mattos, Borromeo; bueno creo que aquí me detengo.
El barrio Cordón tiene una serie de denominaciones: Cordón Norte, Cordón Sur, La Comercial y ahora, debido a la construcción de la Terminal de Omnibus Interdepartamentales, Tres Cruces. Allí se ha construido un importante centro comercial que da beneficios a la zona en cuanto a lo económico y proporciona trabajo a mucha gente. Muy buena locomoción, buen servicio de taxis y remises, bello paisaje, edificación moderna. Varias plazas arboladas, próximo al bonito Parque Batlle. Además muy buen acceso a hospitales, sanatorios y mutualistas. También se encuentra muy cerca la Universidad de la República, la Biblioteca Nacional, el Ministerio de Salud Pública, ANTEL, el Banco Hipotecario y la Dirección Nacional Impositiva.
Actualmente vivo en la calle La Paz y Joaquín Requena, en la misma cuadra donde funcionan dos escuelas públicas (Nos. 61 y 106). El pasado año ambas cumplieron 100 años y fueron muy bien refaccionadas. Hace ya más de 40 años, colaboré con la Comisión de Fomento, formábamos un grupo muy unido y tesonero. Adoro ese local y puedo contarles que el año pasado su frente fue hermoseado por un grupo de jóvenes. Dicho frente fue totalmente coloreado con murales alusivos a la escuela y al campo. Para mi gusto, un verdadero deleite para la vista del barrio, de los transeúntes y también para los pasajeros de ómnibus que transitan por la calle la Paz.
Por sobre todo, un barrio de gente de trabajo, muchos locales, talleres, galpones, garages, pero de todas formas, mi barrio!!  

Así es mi barrio...

Mi barrio Palermo 

por Gladys

Un barrio es la esencia de nuestra vida, en él compartimos alegrías, pesares y esperanzas.
Es la vasija en que vamos formando nuestros sueños.
Aroma de jazmines que llega de mis recuerdos.
Las tardecitas de verano en la vereda conversando con nuestros amigos y vecinos.
La existencia de los años vividos.
El árbol bonachón que vimos crecer día a día con sus flores en primavera, en el que jugábamos bajo la sombra los veranos en la casa grande.
Los canarios flauta que nos despertaban cada mañana con sus trinos.
Las casas de la cuadra en que vivíamos, donde los vecinos adornaban sus balcones con flores, mantas y luces de colores.
Radios transmitiendo alegría con su música.
Máscaras y disfraces que los jóvenes lucían en carnaval cuando pasaban saludando con risas y cantos, jugando con papelitos y serpentinas de colores.
Los juegos con agua que lograban nuestras risas cuando pasaba algún vecino distraído.
Tamboriles infaltables con sus repiques que alegraban las noches.
Pan marsellés calentito que mi madre y mi querida tía Angelita (la que siempre nos cuidaba porque mi madre trabajaba) compartían todas las tardes con el mate.
Reunión con mis amigas en el jardín de nuestra casa, con chocolate que nos hacía mamá, bizcochitos de anís y el exquisito gofio que disfrutábamos y reíamos tanto.
Son relatos de una época pasada, de aquellos que se han ido pero perduran en nuestros recuerdos, de mi niñez y adolescencia que rescato con alegría, de mi querido barrio Palermo donde ha transcurrido toda mi existencia.

domingo, 21 de septiembre de 2014

Presentación del taller


PRESENTACION DEL TALLER
Tiempos de vida, historia(s) del barrio
Coordina Lic. Marta Huertas Prego

El taller "Tiempos de vida, historia(s) del barrio" es un espacio destinado a los adultos mayores del Municipio b, en el cual los participantes comparten una historia en común, al tiempo que van recuperando historias de sus barrios, de sus instituciones sociales, culturales, religiosas o deportivas, sus viviendas, sus personajes, sus calles.

Partiendo de la historia de cada uno, del relato - incluso de quienes los precedieron -, la reelaboración y articulación de sus vivencias pasadas con el presente son formas de apropiación y reconstrucción de la historia de su entorno, pues los testimonios orales de los mayores enriquecen los momentos del pasado recuperados y elaborados como recuerdos. Al mismo tiempo, los relatos escuchados permiten darle cuerpo, y enmarcar en un tiempo y un lugar determinados las vivencias y códigos generacionalmente compartidos. En suma, al ir rememorando segmentos de sus vidas, se va recuperando la subjetividad de una época.

A su vez, el testimonio oral da cuenta de la continuidad de la existencia en todas las etapas del curso vital, desechando ciertos prejuicios y estereotipos negativos sobre la vejez aún muy presentes en nuestra sociedad. Pensamos por ejemplo en el deterioro de la memoria (que muchos consideran todavía una característica ineludible del envejecer), o en la falsa concepción de que al envejecer se va perdiendo interés por las cosas. Estos y otros preconceptos pretenden establecer una ruptura entre la adultez y la adultez mayor. Oponiéndose a esa mirada prejuiciosa, la labor de reminiscencia, permite que los mayores se vean a sí mismos en continuidad y coherencia, y puedan así proyectarse hacia el futuro.
El abordaje de este taller se basa en la participación activa de los adultos mayores a punto de partida de sus relatos, y eventualmente de la recolección de material ilustrativo (fotos, canciones, etc.) y su divulgación mediante la presentación del material producido a través de la crónica en diarios locales, en este blog y en las redes sociales.
Desde el espacio de trabajo en el que se lleva a cabo esta experiencia se sostiene que los adultos mayores tienen capacidad de transformar su realidad, autonomía para generar proyectos, y para fortalecer o construir redes desde las cuales asumir una posición activa. Asimismo, se destaca la importancia de su bagaje cultural y social que los vuelve poseedores de una historia que importa y debe ser transmitida y valorada por toda la comunidad. Agradecemos a la Red del Adulto Mayor y al Municipio b por habernos apoyado en esta tarea. 

Afiche del taller 2014

Si desea ver más grande, click sobre la imagen.